domingo, 31 de enero de 2010

Ojos de cristal



Sus ojos eran como cristales, tan frágiles y transparentes.
Su mirada lo decía todo.
Un sentimiento de tristeza albergaba su corazón.
Ella creía en su destino, pero no podía dejar de pensar en su pasado.
Ella veía a la vida, como una calesita... dando vueltas sin parar.
No tenía un rumbo fijo, solamente se dejaba llevar.
Cada vez que ella se acercaba a esas personas, sentía que le latía el corazón.
Nunca pensó en que iba a sufrir tanto.
Pero un simple cambio de banco cambió su vida definitivamente.
Hoy, se encuentra tratando de recuperar el tiempo perdido...
Tratando de reconciliarse con aquella personas que marcaron su corazón.


Antonella Duarte

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